LA PAZ, 10 nov (Reuters) – El presidente boliviano, Evo Morales, renunció el domingo a su cargo tras ser acusado de fraude en los comicios de octubre en los que fue reelecto y el país quedó acéfalo en medio de una ola de violencia y tensión.Manifestantes gritan consignas contra el presidente boliviano, Evo Morales, en La Paz, Bolivia, 9 de noviembre, 2019. REUTERS/Carlos Garcia Rawlins
Como el vicepresidente Álvaro García Linera y la presidenta del Senado, la oficialista Adriana Salvatierra, también dimitieron el domingo, la situación de la conducción del país andino no estaba clara. El presidente de la Cámara de Diputados, el miembro del oficialismo Víctor Borda, ya había renunciado unas horas antes.
La renuncia del líder indigenista, anunciada por televisión, se produjo horas después de que llamara a nuevas elecciones, presionado por un informe difundido en la madrugada del domingo por la Organización de los Estados Americanos (OEA) en el que señalaba que había encontrado “irregularidades” en los comicios de octubre.
El llamado fue rechazado por la oposición, que pidió su renuncia al igual que las Fuerzas Armadas.
Por la noche, Morales -que denunció un “golpe de Estado”- dijo que la policía busca detenerlo de forma ilegal.
“Grupos violentos asaltaron mi domicilio. Los golpistas destruyen el Estado de Derecho”, afirmó también Morales en su cuenta de Twitter.
Horas después, el jefe de la Policía, Yuri Calderón, dijo en una entrevista telefónica con un canal de televisión que no hay orden de detención contra Morales y agregó que desconoce su paradero.
El mandatario, que asumió el poder en 2006, había ganado las elecciones del 20 de octubre. Sin embargo, una inexplicable pausa en el conteo de votos de casi un día, provocó acusaciones de fraude y generó protestas de la oposición, huelgas y bloqueos de carreteras.
Finalmente, el informe preliminar de la OEA, que realizó una auditoría de los comicios, dio cuenta de inconsistencias en el proceso de octubre y recomendó realizar nuevas elecciones de forma transparente.
“Se encontraron irregularidades, que varían desde muy graves hasta indicativas. Esto lleva al equipo técnico auditor a cuestionar la integridad de los resultados de la elección del 20 de octubre pasado”, señaló el organismo en un comunicado de prensa en el que también habló de “manipulación”.
Según el informe, resulta “estadísticamente improbable” que, pese a ganar los comicios, Morales haya obtenido los 10 puntos porcentuales necesarios para evitar un balotaje con el liberal Carlos Mesa, quien resultó segundo.
Tras conocerse la renuncia de Morales, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, condenó lo que consideró un “golpe de Estado” contra el mandatario boliviano. El presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, otro aliado de centroizquierda de Morales, calificó del mismo modo los sucesos en Bolivia en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el canciller de México, Marcelo Ebrard, dijo que su país estaría dispuesto a ofrecer asilo a Morales. En su cuenta de Twitter, Ebrard aseguró que el Gobierno mexicano ha recibido 20 funcionarios bolivianos del ejecutivo y del legislativo en su residencia oficial de La Paz.
Se espera que los miembros de las cámaras de diputados y senadores se reúnan en las próximas horas para buscar consensos y nombrar a una comisión interina o legislador que lleve las riendas del país en lo administrativo, dijo a Reuters un abogado constitucionalista que pidió reserva de su nombre.
VIOLENTA DISPUTA
Morales había acusado el sábado a la oposición de intentar un golpe de Estado en su contra y un líder opositor lo acusó de dictador, mientras que las Fuerzas Armadas dijeron que no se enfrentarán con el pueblo. [nL2N27P093]
Los oponentes del presidente, entre ellos Mesa y Luis Fernando Camacho -un líder civil de la ciudad oriental de Santa Cruz que se convirtió en un símbolo de la oposición- pidieron reiteradamente la renuncia de Morales.
Luego del llamado a una nuevas elecciones que realizó el presidente, Mesa dijo que Morales no debería ser candidato nuevamente.
“Si le queda un ápice de patriotismo (a Morales) debería dar un paso al costado”, afirmó Mesa a periodistas.
Por su parte, Camacho dijo que planeaba marchar hasta la casa de Gobierno para entregarle al mandatario una carta de renuncia ya redactada y lista para firmar.
“El informe de la OEA nos ha demostrado que existió un fraude y además que el mismo estuvo a cargo del (partido oficialista) MAS, cuyo principal líder es Evo Morales, por lo tanto el señor Evo Morales ha fracturado el orden constitucional y debe renunciar”, afirmó.
En el rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, el Papa Francisco pidió orar por la situación por la que atraviesa Bolivia.
Medios locales informaron que hubo disparos a vehículos que transportaban a un grupo de mineros en su camino a La Paz desde la región minera sureña de Potosí el domingo temprano, causando varios heridos, entre otros hechos de violencia.